El nuevo centro de salud, que también ofrecía atención a la comunidad cada vez que el Hospital Regional viera sobrepasada su capacidad, estaba ubicado en la manzana que formaban las calles Bories, Sarmiento, Magallanes y Yugoslavia. Contaba con 39 camas y su superficie no superaba los mil 400 metros cuadrados.
Sin embargo, un fatídico 12 de julio de 1968 la construcción resultó totalmente destruida producto de un siniestro que obligó a los profesionales a trasladar a los enfermos hasta el ex casino de tripulación ubicado en calle Colón N° 638.
En 1971, por gestión de la Armada ante el Ministerio de Defensa, y con los esfuerzos económicos de éste más aportes de la Corporación de Magallanes, se adquirió un hospital de campaña prefabricado cuyo nombre sería “Cirujano Guzmán”.
Al conocer la Historia de Magallanes nos damos cuenta que esta ubicación es significativa, porque el presidente Bulnes entendía la importancia de Magallanes y fue el Capitán Guillermos, como fuera conocido, quien con la Goleta Ancud inicia la historia administrativa. Por otro lado estamos frente al ovejero que es el símbolo del gran esfuerzo que significa vivir acá y que con su movimiento eterno guía el progreso de la región.
El cirujano Francisco Cornelio Guzmán fue el médico y héroe de la Esmeralda el 21 de Mayo. La historia dice que el doctor Guzmán era modesto, altruista por principio y abnegado por convicción. El espíritu esta en este hospital que con lo poco que tiene trata de ayudar al máximo posible.
El nuevo hospital, cuya administración siguió en manos de la Armada fue adquirido a la firma estadounidense Elder International Inc. Su diseño contemplaba un inmueble de un piso y estaba compuesto por ocho alas o wings comunicados por un pasillo central.
Su superficie inicial era de 3.423 metros cuadrados y tras varios proyectos de mejoramiento, alcanzó los 5.568 metros cuadrados. Esta segunda construcción, inaugurada el 10 de noviembre de 1971, contaba con servicio de urgencia, 15 policlínicos generales y de especialidades, servicios de apoyo diagnóstico y terapéutico, además de pabellones, salas de parto y camas de hospitalización en el servicio de medicina quirúrgica.
Pese a que en un principio, la atención a la población civil de la región de Magallanes se inició tímidamente y en orden a las necesidades más urgentes, durante las últimas décadas, las prestaciones a pacientes externos se mantuvieron en el orden del 40%. Este hecho, sumado a la expiración de la vida útil del inmueble y las necesidades médicas por modernizar equipamiento, determinó la construcción por fases de un nuevo hospital. Las modernas instalaciones doblan la superficie original alcanzando los 11.300 metros cuadrados, suprimen las salas comunes y otorgan una gran comodidad y seguridad a los pacientes.
El personal que labora en el Hospmag es de 300 personas aproximadamente, de las cuales la mitad es personal contratado directamente por el hospital.
La remodelación del hospital entre años 2000 y 2012 es conocido también como Proyecto Patagonia, era una apremiante necesidad de la comuna dada la creciente demanda registrada durante los últimos años. Sin embargo este proyecto suponía la interrupción de la atención de pacientes beneficiarios y particulares, algo que no era posible dado el aumento de la demanda por los servicios hospitalarios por lo que se diseñó un proyecto por fases que permitiera el normal funcionamiento del centro con las mínimas alteraciones y manteniendo los estándares de calidad y seguridad.
En 1997, el hospital de las FF.AA. Cirujano Guzmán recibió la destacada visita del Premio Nóbel de Medicina (1990) doctor Donnall Thomas y su esposa. En la ocasión fueron recibidos por el entonces Director, Capitán de Fragata SN Víctor Fernández Maynard. El personal médico que trabaja en el Hospital de las Fuerzas Armadas Cirujano Guzmán recibe capacitación permanente a través de reuniones clínicas que, ya desde el año 84 se realizan periódicamente. Hoy, las conferencias se dictan cada miércoles y en ellas, médicos especialistas instruyen a los profesionales participantes sobre los avances en la medicina en las diferentes áreas.
Pero no sólo la capacitación es permanente y actualizada para ofrecer una mejor atención. El Hospital también ha incorporado modernos equipos médicos para facilitar a sus pacientes la realización de exámenes y tratamientos sin desplazarse hacia el norte del país.
Fue en este hospital, ubicado en la esquina entre Avenida Bulnes y Capitán Guillermos, donde en el año 1976 se implantó el primer marcapasos cardíaco de la región.
Pese a ya en la década de los 70 el Hospital de las FF.AA. efectuaba exámenes endoscópicos, a partir del año 1993 en la región de Magallanes se empezó a escribir otra historia. El hospital se transformó en el primer centro de la región en adquirir una torre de Videoendoscopía, con lo cual dio inicio a una nueva era en esta materia. Múltiples han sido hasta el día de hoy las publicaciones médicas que han realizado los especialistas del hospital en las más importantes revistas de medicina del mundo.
En mayo de 1994 llega al hospital de las FF.AA., proveniente de Israel, el primer Litotriptor de la región. Hasta el día de hoy, este equipo médico que destruye los cálculos renales sin necesidad de realizar una intervención quirúrgica abierta, es el único que existe en toda la Patagonia chileno-argentina y hasta este hospital llegan pacientes desde Comodoro Rivadavia, Río Gallegos y otras zonas australes, aquejados por cálculos en vías urinarias.
En 1997, un scanner de última tecnología se suma al equipo médico del servicio de imagenología del hospital. En tanto, con una inversión superior a los $300 millones, el 13 de abril de 2000 se inaugura la Cámara Hiperbárica de la región. El moderno equipo salvó a un navegante francés de sufrir la amputación de sus dos pies tras haber sufrido un mal de presión. Y, posteriormente a múltiples buzos artesanales de la zona aquejados de problemas similares hasta la fecha.
En el mes de junio del mismo año, un equipo médico a cargo del doctor Roberto Negrín practicó exitosamente la primera intervención quirúrgica de prótesis de rodilla a un hombre de 66 años de edad.
Durante toda su historia el Hospital, por el hecho de atender población mixta (beneficiaria y no beneficiaria) y estar sujeto a las leyes de urgencia y normativas de la República, se acoge a las normas y procedimientos establecidos por el Código Sanitario y el MINSAL, para todos los efectos estadísticos y de normativas técnicas. El complemento con la salud regional se da en todos los ámbitos como por ejemplo la atención de pacientes de diferentes previsiones tratando de ayudar a descongestionar la salud pública y ser alternativa a la privada. La hermandad con hospital regional y también con la clínica ha permitido innumerables veces en todos estos años resolver los problemas críticos de los pacientes. A diario vamos en ayuda con unidades de sangre, o vamos a buscar algún insumo, medicamentos o instrumental a la clínica o al hospital. Siempre ha existido esta integración y colaboración, con la pandemia no fue necesario un gran esfuerzo, la unión fue como siempre efectiva y de muchos beneficio para todos.